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NOTAS

1 Una primera versión de este texto, aquí muy modificada, se publicó con el título de “El ensayo y la poética del pensar”, en Emilia Rébora Togno, coord., Antología de textos literarios en inglés, pp. 261-286. 

2 Alfonso Reyes, “Las nuevas artes”, publicado originariamente en Tricolor, México, 16 de octubre de 1944, y reproducido en Alfonso Reyes, Obras completas, t. IX. 

3 Jacques Vassevière, Essais de Michel de Montaigne, p. 6. 

4 Graham Good, “Preface” a la Encyclopedia of the Essay, editada por Tracy Chevalier, pp. XIX-XX. 

5 Maria Ferrecchia, Il saggio come forma letteraria

6 A este respecto son valiosas las observaciones de María Elena Arenas Cruz, Hacia una teoría general del ensayo. Construcción del texto ensayístico

7 Michel de Montaigne, Essais (1580-), texto establecido por Albert Thibaudet, París, Nouvelle Revue Française, 1939, 2 vols.; Oeuvres complètes, textos establecidos por Albert Thibaudet y Maurice Rat, introducción y notas de Maurice Rat, París Gallimard, 1962 (Bibliothèque de la Pléiade, 14). Hay varias traducciones al español, entre las que mencionamos Ensayos (1580-), trad. de Constantino Román y Salamero, Buenos Aires, Aguilar, 1962, así como Ensayos, edición y traducción de Dolores Picazo y Almudena Montojo, 3 vols., Madrid, Cátedra, 1985. 

8 Francis Bacon, “Essays” (1597), en Works of Francis Bacon, Nueva York, Garrett Press, 1968. Hay varias traducciones al español, como Ensayos sobre moral y política

9 Véase Miguel Gomes, Los géneros literarios en Hispanoamérica: teoría e historia, cap. I. 

10 Georg Lukács, “Sobre la esencia y la forma del ensayo (Carta a Leo Popper)” (1911), en El alma y las formas. Teoría de la novela

11 Theodor W. Adorno, “El ensayo como forma” (1958), en Notas de literatura, pp. 11-36. 

12 Pensemos, sin ir más lejos, en el fuerte carácter situacional del ensayo, que hace confluir elementos enunciativos, dialógicos, performativos. Consideremos también que en eminentes casos de frontera, como las Otras inquisiciones, de Borges, es difícil el deslinde entre ensayo y ficción. 

13 Tomo esta idea del fundamental aporte del historiador francés Jacques Rancière, quien a partir de su lectura de El Mediterráneo y el mundo mediterráneo en la época de Felipe II (1949) de Braudel, plantea un apasionante análisis de la poética de lahistoria, altamente estimulante también para quienes deseen adentrarse en algunos de los caminos posibles del ensayo. 

14 Tomo esta distinción de Ricardo Piglia. 

15 Pierre Glaudes, ed., L’essai. Métamorphoses d’un genre

16 Ibidem, p. VII. 

17 Ibidem, p. VIII. 

18 Ibidem, p. X. 

19 Ibidem, p. XI. 

20 Ibidem, p. XVI. 

21 Ibidem, p. XVIII. 

22 Apud Pierre Glaudes, op. cit., p. XIX. 

23 Ibidem, p. XXV. 

24 Idem

25 Véase Evodio Escalante, “La metáfora como aproximación a la verdad. Ensayo acerca del ensayo”, en Adrián S. Gimate Welsh, comp., Escritos. Semiótica de la cultura. Oaxaca, Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, 1994. Otra edición: México, Joaquín Mortiz, 1998, pp. 289-309. 

26 Se adopta el término ejemplarizante en el sentido que le atribuye Nelson Goodman: toda obra de arte es ejemplo de sí, ejemplo de la propia interpretación que lleva a cabo. 

27 M. Ferrecchia, op. cit

28 Véase Luz Aurora Pimentel, “Sobre el relato. Algunas consideraciones”, en Emilia Rébora Togno, coord., Antología de textos literarios en inglés, p. 24; en este volumen p. 248. 

29 Pierre Glaudes y Jean-François Louette, L’Éssai, p. 26. No deja de resultar sintomático que, mientras que la obra se abre con un esfuerzo de caracterización del género, se cierre con una perspectiva diferente de abordaje del ensayo, al que estos estudiosos consideran, en última instancia, más que un género, una cualidad del espíritu, un estilo del pensar, ligado a la inteligencia. 

30 María Elena Arenas Cruz, “El ensayo como clase de textos del género argumentativo”, en Vicente Cervera, Belén Hernández y María Dolores Adsuar, eds., El ensayo como género literario, pp. 44-45 

31 Georg Lukács, op. cit

32 Georg Lukács, op. cit., p. 94. 

33 Walter Benjamin, “Las afinidades electivas de Goethe”, en Dos ensayos sobre Goethe, pp. 13-14. 

34 Walter Mignolo propone hacer una distinción entre el ensayo hermenéutico, que se define con Montaigne —centrado en la experiencia de un sujeto universal, que se piensa como representativo de la condición humana toda—, el ensayo epistemológico, apoyado en un sujeto del saber —la línea abierta por Bacon, Locke, Berkeley, más ligada al tratado filosófico— o el ensayo ideológico, centrado en un sujeto que asume francamente una postura de comentario y crítica de las costumbres. Véase Walter D. Mignolo, “Discurso ensayístico y tipología textual”, en Isaac Lévy y Juan Loveluck, eds., El ensayo hispánico, Actas del simposio celebrado en Columbia, Carolina del Sur, 1981, p. 53. También véase, Walter D. Mignolo, Teoría del texto e interpretación de textos

35 “Montaigne y Diderot, en busca de una expresión adecuada de sus ideas complejas, multívocas, encuentran un último recurso en un principio poético. El pensamiento engendra la forma. La unidad de la idea y de la estructura es el fundamento estético de un humanismo. Montaigne, en los Ensayos, recrea la plenitud de la conciencia de sí, y así reintegra el yo en el mundo. De manera semejante, Diderot ve la posibilidad de resolver en términos literarios las contradicciones de la filosofía” (apud Terrasse, Rhétorique de l’essai littéraire, p. 51). 

36 Robert Musil, Ensayos y conferencias, p. 343. 

37 María Elena Arenas Cruz, op. cit., pp. 44-45. 

38 Véase Walter D. Mignolo, “Discurso ensayístico y tipología textual”, en op. cit., p. 53. También véase, del mismo autor, Teoría del texto e interpretación de textos

39 Ludwig Rohner, Der deutsche Essay, Materialien zur Geschichte und Aesthetik einer litterarische Gattung, p. 504. 

40 Marc Angenot, La parole pamphlétaire. Typologie des discours modernes, p. 46. 

41 Ibidem, p. 47. p. 46. 

42 Ibidem, p. 46. p. 46. 

43 Edward Said, El mundo, el texto y el crítico, p. 50. p. 46. 

44 Octavio Paz, “Poesía de soledad y poesía de comunión”, en Primeras letras (1931-1943), selección, introducción y notas de Enrico Mario Santí. p. 46. 

45 Remito al lector al diálogo que se establece entre la hermenéutica gadameriana y otras corrientes críticas contemporáneas, como las de Habermas o Derrida, en Jean Grondin, Introduction to Philosophical Hermeneutics. p. 46. 

46 Ibidem, p. 38. p. 46. 

47 Ibidem, pp. 39-40. p. 46. 

48 Ibidem, p. 35. p. 46. 

49 Jean Terrasse, op. cit., p. 139. p. 46. 

50 Thomas de Quincey, “On the Knocking at the Gate in Macbeth” (1823), en John Gross, The Oxford Book of Essays, Oxford, The Oxford University Press, 1992, pp. 131-135. Hay traducción al español, “Sobre la llamada a la puerta en Macbeth”, en Ensayistas ingleses. p. 46. 

51 Walter Benjamin, “Ich packe meine Bibliothek aus. Eine Rede über das Sammeln” (1931), en Gessamelte Schriften, vol. IV, Frankfurt-am-Main, Suhrkamp, 1972, pp. 388-396. Hay traducción al español “Desembalo mi biblioteca (discurso sobre la bibliomanía)”, en Punto de Vista, núm. 26, pp. 23-27. 

52 Odisseas Elytis, Prosa. Seis ensayos

53 Carlos Fuentes, Tiempo mexicano

54 Juan Villoro, Efectos personales

55 Tomás Segovia, “Tipografía y resistencia”, en Recobrar el sentido, pp. 141-151. 

56 José Martí, “Nuestra América” (1891), en Obras completas, t. vi, pp. 15-23. 

57 Germán Arciniegas, “El lenguaje de las tejas” (1937), en América, tierra firme, pp. 170-184. 

58 Julio Torri, “El ensayo corto”, en Ensayos y poemas (1917), reproducido en Tres libros

59 Gabriel Zaid, “La carretilla alfonsina”, en Ensayo literario mexicano, pp. 331-333. 

60 Jorge Luis Borges, “El ruiseñor de Keats”, en Otras inquisiciones (1952), reproducido en Obras completas, vol. 2, pp. 95-97. 

61 William Hazlitt, “El placer de odiar”, en Ensayistas ingleses, pp. 253-258. 


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